Cuestiones climáticas adversas en los Estados Unidos e informes sobre recortes de stocks mundiales fueron los factores alcistas que hicieron trepar la cotización del trigo en el Mercado de Chicago. Todo lo contrario ocurrió con la soja, que, tras dos ruedas consecutivas en alza, ayer terminó con una significativa pérdida en su cotización.
Mientras tanto, las dificultosas negociaciones en el país entre el Gobierno y la dirigencia agropecuaria continúan provocando incertidumbre, y en los recintos bursátiles persiste la escasa actividad comercial.
Según la corredora Morgan, García Mansilla y Cía., los excesos de lluvias al sur del medio oeste norteamericano causaron anegamientos y se esperan pérdidas en algunos lotes en los trigos de primavera recientemente sembrados. No obstante, en la zona núcleo las condiciones son muy buenas.
A esto, según la Dirección de Informaciones y Estudios Económicos de la Bolsa de Comercio de Rosario, los futuros de trigo también cerraron en alza alentados por los temores generados por las escasas reservas mundiales del cereal.
En las pizarras, el ajuste del trigo para mayo en Chicago marcó una suba de 10,57 dólares la tonelada, para cerrar en 339,70 dólares. En Kansas, la ganancia registrada alcanzó los 12,77 dólares por tonelada, al cotizarse el cereal a 361,93 dólares por tonelada.
La soja, en tanto, tras dos jornadas consecutivas de alzas, revirtió su situación por una salida vendedora de los fondos de inversión para captar las ganancias de los últimos días.
La Bolsa de Chicago indicó para mayo una caída de 12,96 dólares por tonelada, al ajustarse el contrato en 494,11 dólares.
El maíz, a su vez, registró un leve retroceso de 0,98 dólar por tonelada, al cerrar las operaciones a 237,59 dólares. Los contratos a futuro tuvieron valores variados. Las posiciones más cercanas estuvieron presionadas por las menores exportaciones, mientras que las más lejanas fueron impulsadas por las lluvias que demoran la siembra del cereal en los Estados Unidos.
Valores nominales
"Con el trigo hay incertidumbre en la Argentina por las noticias que hablan de una posible reapertura de las exportaciones, que tientan a los productores a seguir esperando un precio más competitivo", dijo Ricardo Baccarín, de Panagrícola SA.
Según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, los valores ofrecidos por los molinos por mercadería disponible oscilaron, según la calidad, lugar y momento de entrega y plazos de pago, entre 650 y 805 pesos por tonelada. "Pero ésos son precios nominales que ofrecen los compradores, pero ello no significa necesariamente que las operaciones se concreten. En realidad hay muy pocos negocios, estimó que se está operando un 20 por ciento de lo que se hacía normalmente para esta época, que son unas 100.000 toneladas diarias", completó Baccarín.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) se registró una fuerte caída, de 4,90 dólares por tonelada para la posición mayo, que se ajustó en 225,30 dólares.
La soja local sintió, por su parte el efecto externo y cayó a 875 pesos (25 pesos menos que anteayer) por tonelada por mercadería con descarga inmediata en Timbúes, San Martín, San Lorenzo, General Lagos y Ricardone. De todas formas, las operaciones fueron escasas y no se conoció el volumen negociado. En el Matba, el ajuste para mayo fue de 290,80 dólares la tonelada, con una pérdida de 4,10 dólares.
El maíz quedó sin cambios, a 515 pesos por tonelada con descarga inmediata para la exportación en San Martín y Timbúes. En el Matba, el contrato abril subió un dólar y cerró a 168,30 dólares.
Tampoco el girasol tuvo variantes en sus cotizaciones. Las fábricas de Rosario y Ricardone pagaron 1100 pesos por tonelada con descarga inmediata. En Junín una fábrica pagó 1065 pesos por tonelada.