No ha sido un año fácil para el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG). La aparición de la Lobesia Botrana o polilla de la vid y el cierre de los mercados de Japón y Corea del Sur por la presencia de dioxinas en la carne de cerdo chilena, han exigido a la institución impulsar una serie de medidas para resguardar el escenario fitosanitario nacional.
Pese a ello, el director del SAG, Francisco Bahamonde, indicó que los productos agrícolas de Chiele siguen generando confianza a nivel internacional.
Dioxinas en cerdos
– ¿Corea del Sur sigue sin recibir carne de cerdo?
– Sigue cerrado y estamos trabajando preventivamente para enviar toda la información para dar por superado el tema.
– ¿Qué información es la que falta por entregar?
– Faltan algunos análisis pero tenemos la certeza de que la contaminación se dio por los alimentos de los cerdos. Estamos trabajando en nuevas medidas de seguridad para que esta situación no se vuelva a repetir.
– ¿Hay un riesgo de que Japón vuelva a cerrar las fronteras?
– Sí, el riesgo existe en Japón y en otros mercados. Ese es el temor, nosotros tenemos la esperanza de que las acciones futuras se hagan sobre las garantías sanitarias que nosotros estamos entregando y no por el pasado.
– ¿Cómo evalúa esta situación?
– Estamos trabajando con el sector privado y creemos que hemos logrado contener un accidente químico que no esperábamos.