A casi tres meses que Corea del Sur cerrara, por tercera vez en el año, sus fronteras a las exportaciones chilenas de carne de cerdo a raíz de la detección de dioxinas en algunos embarques de firmas nacionales, la industria ya comienza a sacar cuentas para dimensionar el impacto de no contar con este mercado durante un trimestre entero.
Según el presidente de la Asociación de Productores de Cerdo (Asprocer), Juan Miguel Ovalle, las exportaciones totales del sector –en el peor escenario- podrían caer hasta un 15% durante 2008, tras la medida adoptada por el país asiático.
Esto, porque Corea del Sur representa 31% de los envíos totales de carne de cerdo chilena -estos últimos ascendieron a US$358 millones en 2007-, siendo la nación asiática el segundo país de destino, detrás de Japón.
Ovalle expresó que pese a que las empresas han redireccionando sus embarques a otros mercados, principalmente a la Unión Europea, muchas de ellas han debido dejar su producción en nuestro país y añadió que “eso ha hecho que haya mayor abastecimiento de cerdo en el mercado interno, lo que de alguna manera también ha afectado los precios”.
Según el representante gremial el valor de la carne de cerdo pagada a los productores -a nivel mayorista- ha registrado una caída de 12%, disminución que, precisó, no se ha visto traspasada aún a precios finales.
Consultado por la posibilidad que las empresas del sector hayan paralizado inversiones o proyectos, debido a los menores envíos, Ovalle dijo que “los productores han estado bastante cautos y cuidadosos en sus proyectos. No han habido este año y no van a haber proyectos de ampliación”. Agregó que lo anterior se ha explicado también por el alza de costos que ha experimentado la industria.
Gobierno a la espera
En el gobierno, en tanto, aunque no cuentan con un plazo para la reapertura del mercado coreano, están optimistas respecto del desenlace que tendrán las gestiones realizadas, tanto por las autoridades, como por el gremio productor de cerdos. El subsecretario de Agricultura, Reinaldo Ruiz, señaló que ya enviaron el último informe a las autoridades sanitarias de Corea del Sur, especificando el origen de la contaminación de dioxinas y el conjunto de medidas que se tomaron en Chile para garantizar a ese mercado que un evento así no se producirá nuevamente, por lo que están a la espera de la respuesta desde el país asiático.
“Somos optimistas que finalmente con las disposiciones que se han ido tomando por parte del gobierno de Chile, como asegurar la trazabilidad y el retiro del mercado de todas las partidas contaminadas, (…) las autoridades coreanas en algún momento tendrán que convencerse que nuestras medidas son las adecuadas”, señaló Ruiz.
En esa misma línea el director nacional del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), Francisco Bahamonde, señaló que no puede pronosticar una fecha de reapertura del mercado coreana porque “la decisión ahora depende de ellos”.
Agregó que “tenemos todo analizado y queda por saber que otra información adicional pueda pedir Corea (…) hay que ver si se abren nuevas líneas de investigación, pero por ahora creemos que tenemos diagnosticado el 100% de los animales, el 100% de los productos, de los insumos y pensamos que queda muy poco por hacer”, sentenció.