Los mataderos de porcino están llevando a cabo negociaciones para intensificar el ritmo de sacrificio de los lechones con el objetivo de recortar la cantidad de carne de cerdo que se pone a la venta en el mercado e incrementar el precio que recibe el ganadero. Los contactos entre una veintena de las principales empresas del sector, entre las que se encontrarían las principales firmas leridanas, como Vall Companys, Piensos del Segre o la oscense Piensos Costa, se producen con el objetivo de que “la matanza de los lechones con un peso de siete kilos reduzca los costes de alimentación de los animales y descienda la oferta de carne”, aseguraron fuentes presentes en las reuniones.
De esta forma, tras el sacrificio de los lechones, la carne de cerdo se congelaría a la espera del periodo en que se incremente la demanda. El fin de la iniciativa, añadieron las mismas fuentes, es “reducir el número de los lechones para que la acumulación de producción no distorsione el mercado”.
Estas reuniones se producen después de que los ganaderos del sector porcino leridano denunciaran el año pasado pérdidas de casi 50 millones de euros por el incremento de los costes de producción por el encarecimiento de la alimentación animal, lo que hizo que se escaparan de media 15 euros por cada animal engordado.
En estos momentos, según ha podido saber LA MAÑANA, los contactos se encuentran en una fase inicial y todavía no se ha concretado la fórmula para llevar a cabo la medida. El proyecto podría abrir la puerta a un crecimiento de las exportaciones de carne de cerdo congelada y envasada, después de que el precio de los piensos haya descendido ligeramente. Precisamente algunas de las empresas negociadoras ya están vendiendo este tipo de producto a China.