En las carnicerías y negocios populares de la Isla la carne de cerdo se consigue sin dificultad, pero ésta brilla por su ausencia en supermercados. Es distribuido al mayor a comerciantes en aproximadamente Bs 37 el kilo.
ANTONIO VIZCAYA LORETO
La historia se repite nuevamente, cuando está cada vez más cerca la temporada decembrina. La realidad que se observa en negocios populares y en carnicerías de Nueva Esparta es distinta a la establecida por el Gobierno nacional a través de la regulación de precios en la cadena cárnica, la que sólo está vigente en el papel.
En la calle, los costos se ajustan de acuerdo al comportamiento del mercado.
Las fallas de abastecimiento del pernil fueron constantes el año pasado, cuando el Ejecutivo fijó una banda de precio de 22,50 bolívares por kilo, que de forma gradual se ha hecho imposible respetarla por parte de los comerciantes, pues no les genera ninguna ganancia al comprar el producto al mayor a un precio superior.
“No puedo venderlo a 22,50 bolívares el kilo si lo compro a 37 bolívares”, dijo Arturo Castellano, un vendedor del Mercado Municipal de Conejeros, en el municipio García.
Entretanto, al darse un recorrido por los distintos supermercados insulares, este rubro brilla por su ausencia. Sin embargo, en una promoción del hipermercado Makro, vigente entre el ocho y 21 de noviembre o hasta agotarse la existencia, ofrecen este tipo de carne en 36 bolívares el kilo.
Castellano desde hace cuatro meses se dedicó a este negocio. Semanalmente es surtido desde los estados Guárico y Aragua. Para atender a su clientela son suficientes unos cuatro o cinco cerdos de los que se sacan entre ocho y 10 perniles, que son expendidos entre 45 y 48 bolívares.
Recientemente los gremios nacionales se pronunciaron y aseguran que no habrá escasez de cochino durante estas navidades.