Autor: Reinaldo Cubillos G.
Veterinario. Máster en Sanidad y Producción Porcina
Tras un complicado escenario durante el 2011, donde el precio del ganado porcino no mostraba un incremento para amortizar los altos costos de las materias primas, el final de ese año termino neutro, con importantes records de matanzas y de exportaciones. El comienzo del año 2012 se mostró zigzagueante, con una gran oferta y pesos altos de animales, sin embargo, comenzó una gran fuerza de exportación a Italia y Centroeuropa, desde ahí nadie dudo que la subida de los precios en el ganado, no era más que la primera de las que han de seguir. En enero fue increíble la celeridad de cambio que tuvo el escenario, de las constantes perspectivas negativas, en días todo cambió a que se venían tiempos mejores. España en los últimos años ha sentido con fuerza los factores de la globalización, cada año exporta más y más (hoy un 40% aprox.) y con ello aumenta la dependencia de las circunstancias externas. Los meses posteriores, la oferta fue decreciendo constantemente, con pesos de matanza cada vez menores, los precios marcaron records en la última década, sin embargo, los costes de energía, materias primas, la inminente aplicación de la normativa de bienestar animal hicieron que los resultados económicos de las empresas porcinas no fuesen brillantes. La exportación se transformó en un verdadero “gran poder” para el mercado porcino español, Europa compra cerdo de manera muy importante y los mercados de Europa de este y Asia se muestran muy activos en entrelazar lazos comerciales. A mediados del 2012, se tuvo que aprender a gestionar entre la escasez, muchas granjas tuvieron que cerrar por no poder adaptarse a la inminente normativa de bienestar, la demanda aumenta y los mataderos requerían mas cerdos para sacrificio, en Cataluña se tuvo que importar camiones con cerdos franceses y aun así no se pudo completar las cuotas de faenas. A partir de las constantes repeticiones de cotización del precio del cerdo vivo en el mes de junio, quedó claro que las alzas iban a parar, aunque la fuerza del buen precio que existía aun tenia para más semanas, el calor hace que los mercados se depriman y decrezcan las compras, con esto último quedó claro que el mercado del porcino europeo es estacional. Ya en agosto, España tuvo semanas y semanas con una oferta muy limitada que obligó a los mataderos a reducir su actividad (15% a 20%). La entrada en vigor de la Ley del Bienestar Animal el primero de enero del 2013, obligó a remodelaciones en las granjas que redujeron su capacidad, además el maíz estadounidense tuvo precios récord y la sequía en todo EEUU complicó las estimaciones de cosecha. Las oleaginosas y la energía estaban caras y no existían ni perspectivas ni posibilidades de que bajaran. Desde ahí los productores españoles están abocados a unos precios de producción caros, con un crecimiento lento pero constante que los llevó a especular a nuevos escenarios.
En agosto y septiembre la cantidad de cerdos existentes en Europa eran pocos, y los que habían era caros. En Alemania, Francia, Dinamarca, Holanda, Bélgica, los precios del cerdo eran los más altos de la historia reciente. En España también se cotizó a niveles récord y se vió como en agosto la cotización subió cada semana, cosa inaudita (ver figura 1). No hubo precedentes de que en los últimos 25 años, el cerdo subiera ni tan solo un céntimo en agosto. El flujo de caja de las explotaciones porcinas dio un vuelco, el margen fue más que correcto y bastó para limpiar deudas, tapar agujeros y encarar el futuro con optimismo, lo que buena falta hacía. Octubre se presentó con más fluidez en la oferta, la cotización alcanzó el máximo anual. En ese entonces, los economistas porcinos de España no podían negar que este otoño no fue como el de otros años.

Figura 1. Cotización del peso vivo del cerdo español en la última década (Fuente: www.3tres3.com)
En diciembre se está sacrificando a máxima capacidad y así seguirá hasta las fiestas. El alto ritmo actual de sacrificios combinado con el rigor invernal debería ser suficiente para atrapar la abundancia presente.
Para el 2013, se prevé que las exportaciones se reduzcan, como consecuencia primera del descenso de las producciones por encima de un 10% debido a la aplicación de la normativa de bienestar animal. Afortunadamente, en este escenario complejo, hay 3 noticias positivas para el sector. Las dos primeras a nivel global de la UE y la tercera, que afecta directamente a España.
La primera, es que el EFSA ha emitido su opinión sobre los animales clonados, tendencia fundamental para la producción animal del futuro, además la comisión europea de la protección de los animales ha concluido que no hace falta modificar la actual normativa acerca del bienestar animal durante el transporte. La tercera, muy importante también, en este caso para los ganaderos españoles, es que el ministerioo parece dispuesto a abordar en serio y con todas sus consecuencias, la creación de las cadenas de valor, en el ámbito de las cadenas alimentarias. Con todo esto, aun es incierto el futuro del mercado español, cabe de esperar que los precios de las materias primas disminuyan y las cosechas sean más abundantes, y que además la crisis nacional y europea no afecte el consumo. Por el momento sólo queda por parte de los productores y comercializadores del porcino, disfruten de las fiestas y que los flujos de caja sigan siendo positivos.
🙂
interezante