Autor: Ingeniero Producción Agropecuaria UCA, MBA PUC Chile; Lucas Balbi
Consultoría Profesional. Socio en 2B AGRO
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INTRODUCCIÓN
Este trabajo es el resumen de un extenso análisis, con una base numérica compleja, a una pregunta común entre actuales productores porcinos o los inversores futuros: ¿cuál es el modelo tecnológico óptimo de una inversión en un criadero intensivo de cerdos?
En el caso de los nuevos inversores, sin conocimiento del negocio, son normalmente asesorados por diferentes actores de la industria. Los productores porcinos que conocen el negocio, lo hacen normalmente de acuerdo a sus experiencias.
La tecnología que se va a utilizar, y por lo tanto la inversión que se va a hacer, depende de varios factores. El objetivo no es llegar a “la inversión ideal” o “la más rentable” ya que esto depende de varios factores, desde la ubicación de la granja, manejos internos, márgenes del negocio (el de hoy y el del futuro) e inclusive de la tasa de descuento que se tome.
La intención es agregar una visión económica a la decisión de que cantidad de plata invertir y en que invertirlo. Al fin y al cabo, más allá del gusto que nos genera a muchos producir cerdos, tiene como objetivo maximizar la renta de los inversores.
En el presente trabajo se analiza, desde un punto de vista económico y financiero, los resultados de:
a- Una inversión en producción porcina del mismo monto inicial (U$S 6.000.000) y diferentes cantidad de madres (667 vs. 1.000)
b- Una inversión en producción porcina de dos granjas de diferente monto inicial (U$S 6.000.000 vs 9.000.000) e igual cantidad de madres (1.000)
Nivel de inversión
A continuación se detallan cuáles son las consideraciones de los dos planteos. Las diferencias se basan en el nivel inicial de tecnología a invertir.
En la inversión de Mayor Tecnología se considera:
– Túnel de viento en Gestación
– Ambiente controlado en Maternidad
– Ambiente controlado en Destete
– Túnel de viento en Terminación
– Comederos más grandes (basado en mayor peso de faena)
La diferencia de inversión se basa en el costo de sus equipamientos y su instalación, mayores costos de obra civil que implican la mayor tecnología y otros varios gastos que implica aplicar mayor tecnología (demanda eléctrica, grupos electrógenos, etcétera).
Premisas
Para poder proyectar los flujos es necesario asumir ciertas premisas. Las que se tomaron para el análisis de los flujos que se presentan son:
– Margen (U$S/cabeza)
– Cantidad de cerdos vendidos por madre por año
– Peso de faena
– Tasa de descuento
A continuación se expone una breve descripción de estas premisas.
Margen (U$S/cabeza). En esta premisa se juntan variables productivas y económicas, lo que hace muy compleja su definición y, como fue mencionado anteriormente, es variable en el tiempo. Están incluidas la eficiencia de conversión, costos directos, precio de materia prima y también el precio de venta de los capones. Esta premisa tiene una gran incidencia en el análisis que estamos realizando. Un margen menor hace que las inversiones se repaguen en un período más largo de tiempo.
Según datos propios, si tomamos los últimos 10 años, el margen en dólares/cerdo, vario entre -13 y 100 antes de costos indirectos e impuestos, con un promedio cercano a los 40 U$S/cabeza.
Para el análisis vamos a tomar un margen de 0,40 U$S/ kg en la granja de menor inversión inicial y un margen por cerdo de 0,50 U$S/kg (20 % mayor) para una granja de alta tecnología. Este diferencial se basa en una mejor conversión de alimento, ganancia diaria de peso y porque se licuan parte de los costos fijos por un mayor peso de faena.
Cantidad de cerdos vendidos por año. Para el análisis se tomaron 28 vendidos/madre/año en el planteo de mayor tecnología y 25,6 vendidos/madre/año en el otro planteo, o sea 1 lechón más por parto por madre debido a las mejoras. Este índice, como todos, se logra por la ponderación de muchas variables. Dentro de estas la genética que se use suele tener más incidencia que las instalaciones pero se le atribuye un diferencial por parto a las instalaciones en el análisis.
Peso de faena. Ambos planteos contemplan la faena de los cerdos a los 170 días de edad. En el planteo de alta tecnología se asume una ganancia diaria de 706 gr/día y un peso de faena de 120 kg/cabeza. En el planteo de menor tecnología se tomaron 660 gr/día y un peso de faena de 112 kg/cabeza.
Como resumen se toma una mejora de 47 gr/día desde el nacimiento hasta la venta debido a las mejores condiciones logradas por las inversiones tecnológicas.
Producción por madre por año. Esta no es una premisa asumida, sino el resultado de las dos anteriores. La multiplicación de los cerdos vendidos por año y el peso de faena forman la producción anual de las madres y más adelante trabajaremos con este dato de forma de simplificar el análisis ya que toma los dos indicadores en forma conjunta.
Tasa de descuento. Es una medida financiera que se aplica para determinar el valor actual de un pago/flujo futuro. Para el análisis tomaremos un 5 % por arriba del rendimiento de los bonos del país, por lo tanto usaremos una tasa de descuento del 15 %.
Consultado con varios financistas es una tasa que se utiliza normalmente en los flujos de inversiones.
Como resumen, podemos simplificar en el siguiente cuadro, las premisas utilizadas:
Resultados financieros. VAN y TIR de los flujos analizados
Los cálculos de los flujos son complejos y hacen poca atractiva la lectura, pero se pueden revisar en más detalle en www.2bagro.com.
Para realizar un análisis completo se calcularon los flujos futuros a 10 años de las dos opciones. Se tomó en el año 10, una perpetuidad descontada la tasa de descuento (sin crecimiento).
A continuación se detallan los resultados aislados, con algunas explicaciones, cuando solo es necesario
a- Una inversión en producción porcina del mismo monto inicial (U$S 6.000.000) y diferentes cantidad de madres (667 vs. 1.000)
TIR (667 madres): 17,03 %
VAN (667 madres): U$S 491.899
TIR (1.000 madres): 17,55 %
VAN (1.000 madres): U$S 620.755
b- Una inversión en producción porcina de dos granjas de diferente monto inicial (U$S 6.000.000 (i) vs 9.000.000 (ii)) e igual cantidad de madres (1.000)
TIR (i): 17,55 %
VAN (i): U$S 620.755
TIR (ii): 17,03 %
VAN (ii): U$S 737.848
Consideraciones
Según nuestra experiencia, creemos que pensar en llegar a resultados del top 10 del país, es imposible si se basa únicamente en una inversión con buena tecnología. Todo criadero que tenga la intención de lograr índices competitivos tiene que contar con buenas instalaciones pero también con una capacitación continua, planes de incentivos transparentes y justos (lo que supone una permanente revisión de los responsables) y apoyarse en una mejora continua.
Desde nuestro punto de vista, si se decide hacer una inversión alta, hay que planificar la granja para que sea capaz de aprovechar esa inversión realizada. Por lo tanto, además de comprar pisos o comederos de USA, Bélgica o Alemania, se debería lograr una planificación en el resto de las áreas para poder cumplir alcanzar el potencial. Esto implicara un trabajo, desde nuestro punto de vista, mucho más complejo y constante que la decisión de la inversión y tiene que ser tenido en cuenta cuando se recomiendan tecnologías para diferentes empresas.
Muchas veces nos encontramos “compitiendo” por ser quien desteta más lechones o quien vende animales más pesados. Debemos considerar que comparar lechones destetados, sin importar la inversión que se hizo, es solo una medida y no un índice por el cual se debería premiar. Puede estar dando más beneficios (siendo más rentable) una granja con 11 lechones destetados por parto que una con 12 lechones destetados por parto. Clasificar las granjas solo por los índices nos lleva a muchas confusiones a la hora de tomar decisiones que deberían ser evaluadas, como mínimo, considerando una visión económica.
Conclusiones
Como primera conclusión me parece importante observar que la diferencia entre ambos proyectos es de 493 kg/madre/año.
De una forma simple podemos pensar que para lograr los primeros 2.867 kg hace falta invertir U$S 6.000 y para lograr los siguientes 493 kg hacen falta U$S 3.000 adicionales (ingreso e inversión marginal por madre). Es una forma simple de análisis pero no por eso menos válida.
También se puede observar de la misma forma, que para producir 3.360 kg/hembra/año es necesario invertir U$S 9.000/madre (a razón de 0,37 kg carne/año/U$S invertido). A su vez para producir 2.867 kg/hembra/año es necesario invertir U$S 6.000/madre (o sea 0,48 kg carne/año/U$S invertido). Esto quiere decir que la segunda opción produce 0,11 kg carne/año/U$S invertido más que la opción de mayor tecnología (28 %).
Como segunda conclusión, la “inversión ideal o la más rentable” es una decisión que depende de cada proyecto y no es posible definir a un modelo de inversión como el más acertado y traspolable a todo el país. Asumir un solo modelo sin tener en cuenta la ubicación (por lo tanto el clima donde se realiza), la disponibilidad de mano de obra, la producción objetivo de la granja o el retorno esperado por el inversor es una decisión que hace sobre o subestimar la tecnología a utilizar. Esta debe ser evaluada previamente a la toma de la decisión con flujos diferentes en cada opción.
Es por esto que habría que buscar métodos para la toma de decisiones que sean sencillos y que tengan en cuenta el retorno sobre la inversión. Esta era la idea de este trabajo y espero que pueda ayudar a aportar en esta línea.
Nos parece importante resaltar que los resultados entre ambos proyectos son muy similares y cualquier cambio en las premisas puede hacer cambiar los mismos. Esto es lo más interesante que descubrimos al investigar y hacer un análisis de sensibilidad de premisas estudiadas. El nivel de inversión inicial va a ser una determinante importante en el potencial productivo y económico de la granja y es por esto que creemos que lo más importante es tener presente que no existe un nivel de inversión que sea el más rentable para todos los proyectos de cerdos del país y que tiene que haber coherencia entre todas las decisiones que se tomen a la hora de decidir qué inversión se quiere llevar a cabo.