Con el cierre de las importaciones de carne porcina brasilera hacia Argentina, se dejó al descubierto una vieja debilidad, señala el diario La Nación de ese país. Según ellos, la producción de carne de cerdo interna es insuficiente para abastecer el consumo interno con cortes frescos y materias primas para otras industrias.
Irónicamente, hace 20 años Brasil inició su industria porcina con reproductores argentinos. Hoy, Argentina genera 3.43 millones de cabezas de chancho mientras que Brasil la supera ampliamente con 40 millones.
Fuente consultadas por La Nación explicaron posibles medidas para revertir esa situación. Según ellas, lo primero que se tiene que hacer es aumentar el número de hembras en producción de 250 mil a 300 mil. También, se debe ganar terreno frente a la carne vacuna. Por cada kilo promedio per cápita que aumente el consumo, se deben sumar 20 mil madres. Finalmente, se debe mejorar la inversión en madres para mejorar su rendimiento.