Además de secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, dependiente del Ministerio homónimo, Lorenzo Basso ha sido decano de la Facultad de Agronomía de la UBA, proveniente del área de la porcinotecnia.
En esta entrevista con Infocampo relata cómo reaccionó el sector privado a los créditos a tasa subsidiada de los bancos Nación y Provincia y se esperanza en que de acá a 2020 se incorporen a la producción 100.000 nuevas madres, lo que representa un 50% del stock actual.
-¿Cómo fue la reacción a la oferta de créditos blandos para la ganadería?
-Para el plan de ganados y carnes anunciado en febrero, fueron 400 millones del Nación y 200 del provincia. Éstos se agotaron por lo menos hace dos meses y ahora se amplió con el Provincia, sólo para ganadería bovina, por $100 millones, que creemos que ya fueron tomados.
-¿Cómo fue puntualmente la respuesta del sector porcino?
-Para esta actividad lo que hicimos fue crear una línea especial de $100 millones, con opción a $100 millones más, a una tasa subsidiada de 9,9% pero sin límite por proyecto. Es decir, podía ser más de un millón de pesos por productor.
-¿Qué tipo de proyectos se presentaron?
-Diría que en término medio corresponden a productores medianos que quieren ampliar o incluso duplicar su capacidad de producción. Hay casos de productores nuevos, que generalmente son empresas relacionadas al acopio de granos o aceiteras, que quieren utilizar el subproducto.
-Eso es novedoso.
-Sí, la clave acá es que este cluster típico constituido por la producción primaria, el acopio y la producción de aceite y harina proteica, se valoriza en la producción de carne, sea de ave o cerdo.
-¿Hay alguna predominancia geográfica en los proyectos?
-Aclaremos que hay dos tipos de carpetas, la técnica y la que evalúa el banco. Nosotros vemos la técnica, y ahí vimos muchas del corredor oeste de Buenos Aires y La Pampa. Hay algo más de Entre Ríos y de Santa Fe y Córdoba.
-¿Cómo puede evolucionar el stock de madres porcinas a partir de esto?
-Diría que si sumamos los que conozco con crédito o sin crédito, en este año se van a instalar entre 5 y 10.000 madres. Son proyectos de 500 y de hasta 1.000 madres. Hay algunos que arrancan con 1.000 pero apuntan a 5.000 final.
-¿Cuál es su visión del negocio?
-Con el marco actual de la carne vacuna, el maíz, etcétera, el sector porcino tiene hoy la mayor oportunidad de crecimiento en su historia. En el PEA (Plan Estratégico Agroalimentario) que se está esbozando en la cadena estamos pensando en un desarrollo de 10.000 madres por año durante los próximos seis o hasta 9, estamos hablando entre 60 y 100.000 madres más en los próximos años.
-¿Qué representa esa cifra?
-Hoy se hablan de 220/230.000 cerdas, de manera que el objetivo para 2020 sería crecer un 50%. Pero además tiene que mejorar la productividad de las que ya están.