Un informe revela que la cabaña de cerdos en la provincia ha descendido en 127.000 cabezas desde el 2005.
«Para el porcino español, el 2008 no ha sido un ejercicio bueno, ya que han desaparecido explotaciones y se ha producido un ajuste importante del censo porcino, además de haberse mantenido durante buena parte del año la presión de los costes». Es una de la conclusiones del informe Excelpork del curso pasado elaborado por Analistas Financieros con el patrocinio de Elanco y Caja Segovia.
La presentación de este nuevo estudio tendrá lugar hoy, en la sala de la entidad de ahorro. En un contexto de crisis general, el estudio alerta de que la actividad todavía estará sometida durante un tiempo a los avatares de la recesión.
No todo es pesimismo. El promedio de los precios de la carne durante el año pasado no llegó a los buenos niveles del 2006, aunque fueron mejores que las «catastróficas» tarifas registradas en el 2007. Las expectativas son aún mejores para el presente ejercicio, añade el estudio, que también califica de «muy favorable» la tendencia del consumo de carne de cerdo frente a la de vacuno. Por lo tanto, los agentes esperan un aumento de los beneficios en el 2009.
El sector productor de porcino segoviano no ha sido ajeno a los problemas, agravados por casos concretos como el conflicto de Proinserga. Segovia concentra explotaciones ganaderas y relevantes empresas transformadoras, suministradores de materias primas, lo que le confiere una mayor proyección en la medida en que la concentración de las diferentes actividades vaya cuajando en el futuro.
Por otro lado, la cabaña porcina ha descendido, pasando de más de 1.150.000 cabezas en el 2005 a 1.023.000 en agosto del 2008. El estancamiento en la provincia supone la reducción de su peso relativo, que se ha situado por debajo del 30% con respecto a la región y el 4% en el ámbito estatal.
Cerca del 80% de la producción porcina sale fuera para ser elaborada en otras provincias. Esta debilidad se puede tornar en una oportunidad, ya que se percibe un alto margen de crecimiento si se logra ampliar la transformación de la producción local. Una de las medidas estrella para paliar este problema ha sido la construcción del Centro Integral Cárnico, que constituye el proyecto agroindustrial más importante de los últimos años.