Una de las enfermedades más contagiosas que afectan al ganado vacuno y que causa importantes pérdidas económicas cada año es la fiebre aftosa. Esta afección, producida por un virus del género aftovirus, influye en el rendimiento productivo y reproductivo de la vida útil del rebaño, también en la disminución y desvalorización de los productos de origen animal, además de las limitaciones en el mercado internacional.
Este virus afecta a animales de pezuña hendida como bovinos, porcinos, ovinos y caprinos, y se caracteriza por producir fiebre alta y la aparición de vesículas o aftas en la boca, lengua, ubre, pezones y pezuñas del animal infectado, lo cual inhabilita al animal infectado para buscar y consumir alimentos, y amamantar a sus crías o ser ordeñadas.
Según explica el doctor Disney Pino, profesor de la Facultad de Ciencias Veterinarias de LUZ, este virus es de fácil transmisión, ya que se elimina por la saliva, orina, moco nasal e intestinal y por el semen, siendo estas las formas de diseminación de la enfermedad entre el ganado, su efecto es tan rápido que puede contagiar en poco tiempo todo el rebaño, pues el virus puede diseminarse incluso por el viento.
Pérdidas económicas
La fiebre aftosa genera grandes pérdidas económicas al productor agropecuario pues produce la disminución en la producción de leche y carne, muertes de animales, disminución de peso, entre otras. Según datos aportados por la Secretaría de Desarrollo Agropecuario del estado Zulia (SDA Zulia), las pérdidas generadas por la producción láctea de 10 vacas contagiadas de fiebre aftosa asciende a más de Bs.F. 13 mil, lo cual representa grandiosas pérdidas en términos anuales.
Las economías de los países que tienen sus rebaños infectados con este virus también se ven afectadas, ya que no pueden comercializar su ganado por ser países endémicos de aftosa, y mientras no sea erradicada siempre tendrán las puertas cerradas en el mercado internacional, tal y como lo establecen las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
"La erradicación de la fiebre aftosa en Venezuela es un proceso que demandará varios años, ya que en los últimos tiempos ha habido un repunte significativo de casos presentados en el país. Estados que anteriormente eran libres de aftosa han presentado focos, y por ello es importante unir esfuerzos entre los entes gubernamentales y los productores agropecuarios para su erradicación", agregó el profesor Pino.